lunes, 11 de agosto de 2008

ROBO DE PELICULA EN UNA JOYERIA DE ALCAMPO


Los ladrones se introdujeron en el centro comercial, rompieron varios escaparates y en la Joyería Miró sustrajeron género por valor de más de 120.000 euros
Entre las tres y las cinco de la madrugada de ayer, una banda de ladrones se introdujo en las instalaciones del centro comercial Alcampo, en Marratxí y perpetraron un elaborado robo en tres establecimientos.


«Esta gente sabía dónde venía. Seguro que han estado varios días vigilando la tienda. Han ido directamente a las joyas y relojes de valor. Es difícil calcular el valor de todo pero podría superar los 120.000 euros», comenta visiblemente afectado Fernando, el propietario de la joyería.
Según las primeras hipótesis, no se descarta que en el robo esté implicada alguna persona que conoce muy bien el funcionamiento del centro comercial.


La banda de ladrones subió hasta la cubierta superior del centro comercial. Una vez allí arriba aprovecharon una de las claraboyas, la cortaron y al más puro estilo cinematográfico, como comentaban ayer algunos clientes del centro, se deslizaron con una cuerda accediendo al interior del habitáculo. Una vez dentro, aprovecharon la zona ciega de las cámaras de seguridad, rociaron con salfumán los grandes cristales de los escaparates y con un pico, o una herramienta similar, lograron romper los mostradores y sustraer el género.


En la joyería se hicieron con una amplia variedad de joyas y relojes de gran valor. Marcas como Dolce & Gabbana, Swatch, Lotus, Viceroy, Festina, Fossil o Tommy Hilfiger fueron algunas de las elegidas por los amigos de lo ajeno.


Rápidamente una dotación de la Policía Judicial de la Guardia Civil se personó en el lugar de los hechos. También lo hizo una dotación de la Policía Científica, dado que en su afán de robar con rapidez, los ladrones se cortaron con los cristales y dejaron muestras de sangre en los escaparates.
El análisis de la sangre podría ser determinante para detener a los delincuentes en un corto espacio de tiempo.


Según la versión de los responsables de la joyería, el robo se debió de producir a primera hora de la madrugada de ayer. «La vigilante de seguridad se dio cuenta del robo alrededor de las cinco de la mañana. Ya te puedes imaginar, un guardia de seguridad para cubrir más de 20.000 metros cuadrados de superficie

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